El Primogénito
Y Anna oró y dijo: Mi corazón se regocija en Jehová, Mi cuerno es ensalzado en Jehová; Mi boca se ensanchó sobre mis enemigos, Por cuanto me alegré en tu salud. No hay santo como Jehová: Porque no hay ninguno fuera de ti; Y no hay refugio como el Dios nuestro.
Cindy J. Gil
5/8/20245 min read


Y ANNA oró y dijo: Mi corazón se regocija en Jehová, Mi cuerno es ensalzado en Jehová; Mi boca se ensanchó sobre mis enemigos, Por cuanto me alegré en tu salud.
No hay santo como Jehová: Porque no hay ninguno fuera de ti; Y no hay refugio como el Dios nuestro.
1 Samuel 2:1-2
Estas son las palabras de Anna. La historia de Ana. Una mujer que desea tener un hijo. Cuando vemos su historia en 1 Samuel capitulo 1 y 2, aprendemos que era esteril. Su familia dedicaba un tiempo especial del ano, para ofrecer sacrificios en Silo, donde se encontraba el tabernaculo de Dios y tambien los profetas y sacerdotes. Como tenian por costumbre, Ana y su familia viajaban a Silo para elaborar una cena especial y para ofrecer sacrificios a Dios. Pero este ano, Ana decidio traer su sacrificio y también su petición ante Dios. Ella, siendo mujer, alguien sin posicion ministerial paso la multitud y entro al lugar santo, al templo donde se encontraba la lampara encendida que representa el Espiritu de Dios. Y oro en silencio, clamando a Dios con todo su corazon. En algun momento, el sacerdote Eli, la ve, y piensa equivocadamente que ella esta ebria. Mas Ana, le dice lo contrario. Dice 1 Samuel 1: 13 -16, 17,18.
Atravez de esta historia, se confirma cuando Jesucristo dijo, 28 Venid á mí todos los que estáis trabajados y cargados, que yo os haré descansar. (Mateo 11:28).
La oracion de Ana fue escuchada. Esto resulto en el primer hijo de Ana, su primogenito, Samuel. Pero, hay mas en esta historia porque ella prometio que su hijo iba ser dedicado al servicio de Dios. No solo como un futuro ministro pero tambien como Nazareo que en Hebreo es Nazir, significa apartado. Entre los Nazareo mas notables conocemos a Samson. Jueces 13:5. La Palabra de Dios dice, que habian ciertos requisitos para cumplir como Nazareo, (Numeros 6:3-8). Entre ellos no beber vino ni sidra, no cortar el cabello, y no tocar a los muertos. El proposito era no contaminarse. Nota que ahora comprendemos que hay diferencia entre contaminación y corrupción. En los tiempos antiguos los hijos de Dios se protegian contra la contaminacion fisica mas ahora nosotros nos protegemos contra la corrupción Espiritual. Y por tanto, aun en nuestros tiempos no bebemos bebidas alcohólicas exepto el vino durante la Santa Cena. Y abstenemos de esto porque sabemos que estas bebidas que contienen alcol pueden llevar al hijo de Dios a la corrupcion de su cuerpo y por tanto de su Espiritu.
Mas no solo nos cuidamos de esto sino tambien que nos abstenemos de cualquier actividad que pueda corromper nuestra mente y cuerpo. Entre ellos, la Biblia nos advierte en 1 Corintios 6:18, “Huid la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre hiciere, fuera del cuerpo es; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca.”
Y 1 Corintios 6: 20 Porque comprados sois por precio: glorificad pues á Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.
Vemos entonces el esfuerzo que Ana realizo de dedicar a su primogenito no fue en vano. El proposito era que Dios fuera gloricado en el cuerpo y en el Espiritu. Y ahora, nosotros tambien aspiramos hacer lo mismo.
Glorificar a Dios en cuerpo, mente, y Espiritu.
Si continuamos leyendo en 1 de Samuel capitulo 2, versiculos 1-2 notamos el crecimiento espiritual de Ana. No solo su fe se a afirmado en Dios, pero ahora es una persona completamente diferente. Su presente y su futuro estan firmemente atados al proposito de Dios.
De modo que sus palabras se hacen famosas, 1 Samuel 2:8. Ana dedica su hijo unigénito a Dios. “El levanta del polvo al pobre, Y al menesteroso ensalza del estiércol, Para asentarlo con los príncipes; Y hace que tengan por heredad asiento de honra: Porque de Jehová son las columnas de la tierra, Y él asentó sobre ellas el mundo.”
El Rey David tambien compartio este sentimiento en el Salmo 113:7,8, Reina-Valera Antigua
7 El levanta del polvo al pobre, Y al menesteroso alza del estiércol,
8 Para hacerlos sentar con los príncipes, Con los príncipes de su pueblo.
Nosotros tambien, reconocemos que sin Dios no somos nada. Todo lo bueno, todo lo puro, todo lo santo en nuestras vidas existe porque hay una fuente en nuestro ser. De donde nace la bondad, la misericordia, y el Amor de Dios. Con Dios no hace falte nada. Porque Dios suple todas nuestras necesidades.
Ana dedica su hijo unigénito a Dios. “El levanta del polvo al pobre, Y al menesteroso ensalza del estiércol, Para asentarlo con los príncipes; Y hace que tengan por heredad asiento de honra: Porque de Jehová son las columnas de la tierra, Y él asentó sobre ellas el mundo.”
En nuestros tiempos, Dios ya no demanda de nuestra primogenitura como en los tiempos Antiguos, cuando pedia el primogenito de los Israelitas, sino que Jesucristo se dio a si mismo como sacrificio en la cruz del calvario. Hebreos 9:24-26 dice: Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el mismo cielo para presentarse ahora por nosotros en la presencia de Dios.25 Y no para ofrecerse muchas veces á sí mismo, como entra el pontífice en el santuario cada año con sangre ajena; 26 De otra manera fuera necesario que hubiera padecido muchas veces desde el principio del mundo: mas ahora una vez en la consumación de los siglos, para deshacimiento del pecado se presentó por el sacrificio de sí mismo.” Por esto, nuestra Fe debe ser aun mas firme en Dios, nuestro deseo se serle fiel queda inmovible, y nuestro deleite es servirle a Dios. Pues dice en Proverbios 23:26, Dame, hijo mío, tu corazón, Y miren tus ojos por mis caminos.
Conclusion
La leccion tomada del ejemplo de Ana es el llevar nuestras peticiones a Dios. Con un corazon humilde. En estos tiempos hay que pasar la muchedumbre. Es decir, aunque parezca que muchas esten en el portico del templo, debemos de ignorarlos y entrar al lugar Santo, donde esta la lampara encendido, donde se encuentra la presencia del Dios Altisimo. Y alli, donde esta solo Dios y nosotros, hablar de corazon, aunque en silencio, porque Dios conoce cada pensamiento y cada anhelo de nuestra alma. Dios sabe el dia, cuando se cumplira su voluntad en nuestras vidas.
Por segundo, debemos tener nuestra lampara encendida en todo tiempo. Al pasar el tiempo, Samuel el primogenito de Ana, estaba en templo y la lampara estaba encendida. Y fue alli, cuando Samuel oyo la voz de Dios por primera vez. (1 Samuel 3). Nosotros tambien, cuanque estemos dormidos debemos de habitar de forma que nuestra lampara este encendida. Que no haga falta el aceite en nuestro ser. El Espiritu Santo more en nuestro corazon. Esto lo lograremos si nos mantenemos apartados del pecado y la maldad. Y si llevamos una vida de oracion como Ana.
Tercero, debemos de estar en el lugar indicado por Dios. Ana tuvo que dejar su hogar y viajar a Silo donde moraba el tabernaculo de Dios.
Ahora Dios habita no en templos hechos por mano de hombre sino en un nuestra Alma. Por tanto, que ni la enfermedad, si la muerte nos puede separar de Dios. Mas, si debemos de hacer de nuestra vida una jornada que nos acerque mas a Dios. Asi como Ana se encamino con su esposo y familia hacia Siloh nosotros tambien debemos de dirigir nuestros pies hacia lo recto.
De esta forma, si Dios nos llama hoy o manana, como nos encontrara? Nos hallara haciendo su obra.
© Cindy J. Gil, 2025